(Este tema fue desarrollado por el Padre Daniel Masín en la primera jornada de confirmandos en la Parroquia Ntra. Sra. de Caacupé el 23 de junio de 2013)
Nuestro continente es, desde hace
cuatro siglos, pobre y cristiano. La inmensa mayoría del continente vive en
situaciones de hambre y miseria, que se manifiestan en la mortalidad infantil,
muy elevada, falta de vivienda digna, problemas de salud, salarios bajísimos,
desempleo y subempleo, inestabilidad laboral, migraciones masivas,
analfabetismo, marginación de indígenas, esclavitud de la mujer, etc.